La gestión de la Junta de Andalucía en materia de Formación y Empleo aboca a Andalucía a tener la tasa de paro juvenil más alta de España

El parlamentario andaluz del PP de Almería Amós García ha afirmado en la Comisión de Asuntos Europeos del Parlamento Andaluz que la paralización de los fondos europeos que ha llevado a cabo el Gobierno de Susana Díaz ha abocado a Andalucía a tener la tasa de paro juvenil más alta de España un 54,06% frente al 41,6% de media en España, situación que se podría haber evitado si la presidenta andaluza hubiera afrontado una reforma normativa que asegurase la correcta ejecución de sus fondos, hubiera incrementado las medidas de control internas y auditorias, o hubiera colaborado con la justicia abriendo de par en par la administración.
Sin embargo, continúa explicando García, lo más sencillo para Susana Díaz era paralizar las convocatorias de ayudas y subvenciones cofinanciadas por Europa para la formación y el empleo, renunciando así  tanto a fondos estatales como a financiación europea correspondiente al periodo 2007-2013 y comprometer la de 2014-2020, lo que nos ha llevado a ser la comunidad autónoma con más tasa de paro y temporalidad en el empleo de toda España y Europa.

Ante esta situación, el parlamentario del PP insta a la Junta a fomentar las políticas de juventud porque sólo de esta forma Andalucía dejará de ser la comunidad donde existe un mayor porcentaje de parados de baja formación, con lo que encontramos una “relación causa efecto entre la mala gestión de los fondos para formación y empleo del Gobierno andaluz y la pérdida de fondos de más de 1.300 millones de euros, así como con la situación económica y el número y perfil de los parados en Andalucía”.

Amós García lamenta que los jóvenes andaluces y almerienses tengan bloqueados incentivos como el Bono Joven, teniendo este año sin resolver y bloqueados el pago de más de 10.000 ayudas a empresas para contratar a jóvenes de los años 2014, 2015 y 2016, “incentivos a través de pymes y autónomos que la junta ni resuelve ni abona”.

Sobre las ayudas dirigidas a la creación de empresas para los jóvenes agricultores en el marco del Programa de Desarrollo Rural de Andalucía 2014-2020, de las convocatorias de 2015 y 2016 se desprende según el parlamentario popular que “sólo se las han concedido a un 37%, es decir ni a 4 de cada 10; a casi 1.000 solicitantes la Junta se las ha denegado por falta de disponibilidad presupuestaria; a casi 2.000 solicitantes ( 4 de cada 10) la Junta les ha denegado la ayuda por supuestos incumplimientos de requisitos que no son tales; y un  12,56% han desistido de la ayuda por la falta de confianza en su tramitación”.

Ante esta situación, Amós García señala que lo que ha ocurrido es que “la Junta no ha destinado el presupuesto adecuado para las ayudas comprometidas en el PDR para la creación de empresas para los jóvenes agricultores y al final han sido alrededor de 4.000 los que han perdido esta oportunidad”.

Por otra parte, el parlamentario del PP señala que hay ayudas europeas para jóvenes, como por ejemplo el Programa Eurodysee, que ofrece la posibilidad a los jóvenes de trabajar formándose y obtener una remuneración, programa puesto en marcha en Murcia, Valencia o Cataluña, y sin embargo, en Andalucía ningún joven se podrá beneficiar por no adscribirse la Junta a este programa.

Otros ayudas como las incluidas dentro del Programa Marco para la Competitividad e Innovación, que es uno de los proyectos más importantes de la UE, que consta de tres programas, uno para la iniciativa empresarial que pretende solventar el problema de acceso a la financiación, uno de los obstáculos más importantes para emprendedores, otro de programa de apoyo a las TIC para el fomento de las nuevas tecnologías, información y comunicación, y otro Programa de Energía Inteligente para el desarrollo de fuentes de energía ecológicas y sostenibles. Así como el Programa de Erasmus Jóvenes Emprendedores, Programa Jeremy o Programa Eureka de los cuales, o no los conocemos, o son conocidos lamentablemente por la problemática que han generado como por ejemplo el caso de la investigación judicial de los Programas Jeremy.

Por último, pide a la Junta que fomente las políticas de juventud en Andalucía, porque sólo de esta forma estará garantizada la actividad económica en una tierra como la nuestra en la que la brecha de paro juvenil se sigue agrandando (en 2014 el diferencial de paro juvenil era de 7 puntos con el resto de España y hoy alcanza ya casi los 12,5 puntos).